Búnker: Memorias de encierro, rimas y tiburones blancos (Reseña)

Creo que voy a probar un nuevo formato para las reseñas, un poco más clásico en su organización. No es algo que vaya a dar más o menos valor a las entradas, pero puede dar alguna información interesante para según qué lectores. Vamos a probar.

Conocí a Toteking a principios de los 2000 con una canción que incluía un CD que me regalaron al comprar una revista. La canción me gustó, pero no supe de él en años. Cuando volví a escucharlo me encontré con una situación que se ha repetido con otros artistas del rap, me gusta como escriben pero no me engancho a su música. Esto cambio con T.O.T.E., que es más o menos cuando empece a disfrutarlo de una manera más cómoda, y es posible que desde entonces se haya convertido en una de las pocas personas que cuando sacan un disco o un tema sé que voy a darle una oportunidad con gusto.

Todo este prologo sólo lo escribo para defender a continuación cosas que no suelo defender, así que lo primero que hago es preparar mi armadura y vigilar el camino. Cuando me entero de que Manuel González (que es cómo se llama Tote en realidad) va a publicar un libro la reacción es instantánea. Otro que ha cedido a la tontería esta de las editoriales para sacar rédito de algo que no es lo suyo. Lo hacen los youtuber y ya han caído varios músicos, pero pensé que él no cedería en estas cosas. Luego me acordé de sus letras, de sus continuas referencias a libros y autores y de que es un bibliófilo que me hace sentir como un absoluto ignorante en lo que a literatura se refiere. Este es el único motivo por el que me arriesgo a darle una oportunidad a uno de estos libros que tanto detesto.

Así es como decidí darle una oportunidad, con miedo, pero sabiendo que leía a alguien que respetaba lo que hacía. Y de esta manera me introduje en las páginas de Búnker: Memorias de encierro, rimas y tiburones blancos.

Titulo: Búnker: Memorias de encierro, rimas y tiburones blancos.

Autor: Toteking.

Editorial: Blackie Books

Año de publicación: 2020

Páginas: 232

A grandes rasgos el libro es una especie de memorias. Salvando las diferencias, el concepto me recuerda un poco a lo que hacía Truman Capote en Música para camaleones. Es una especie de ejercicio que se plantea al autor, un reto, para ver si sabe escribir. Y siendo honesto, creo que se nota en sus páginas que el autor es un lector voraz, que sabe lo que le gusta y que no quiere hacer perder el tiempo a la gente como, supongo, no le gusta a él que se lo hagan perder.

En este Búnker podemos encontrar historías de juventud y de madurez, cosas muy personales y anécdotas que podrían pertenecer a una gran parte de nosotros. En esto reside gran parte del atractivo. En esto y en la comodísima lectura que nos ofrece Toteking, eso es algo que he agradecido mucho. Me daba miedo que siendo un escritor novel y sabiendo de su fama entre los que le conocemos, se quisiera mostrar como una persona «culta» y resultara pedante. Nada más lejos de la realidad, Tote utiliza un lenguaje sencillo pero con conocimiento del léxico que esgrime, manejando con soltura las palabras y mostrando que sí tiene cierto estilo.

Del contenido del libro no detallaré nada más. Agradeceré, simplemente, la honestidad que se percibe en la mayoría de sus páginas y esperaré a que en el futuro nos ofrezca algo de ficción. Una autentica prueba definitoria que podría ofrecernos algo bueno que disfrutar más adelante o un legado de un único tomo que sería mejor no ensuciar. En este último aspecto supongo que el responsable del prologo y la gente de la editorial sabrán apoyarle, igual que intuyo que han tenido peso en el orden (bastante acertado) del contenido.

Sólo me queda despedirme agradeciendo a Blackie Books por la preciosa edición del libro. Que personalmente es algo que valoro mucho y rara vez encuentro.

Nos seguiremos leyendo.